Una gran pasión, un gran amor a la Música y la Danza acompaña a un bailarín a lo largo de su carrera y formación.
Pero a la par, existe la memoria muscular y un bailarín kinestésico, enamorado del arte, la alcanza, la potencia y la mantiene a lo largo de su vida.
Los bailarines poseen la destreza de comunicarse a través de la creación, el movimiento y la elaboración incluso de sus propias coreografías.
Un ejemplo de ello es el conmovedor video que se ha hecho viral en redes sociales durante los últimos días: la organización Música para Despertar difundió una grabación de Marta González, una bailarina profesional con Alzheimer que hizo parte del Ballet de Nueva York en los años 60 como Primera Bailarina y quien, desde su silla de ruedas unos meses antes de fallecer, interpretó una pieza de El Lago de los Cisnes, al escuchar la música del compositor Piotr Ilich Chaikovski.
El caso demuestra cómo a pesar de una enfermedad degenerativa, su memoria muscular respondió al escuchar la música, recordando momentos sublimes e importantes de su vida.
Y es que a través de la inteligencia Kinestésica adquirimos información que, por efecto del movimiento y la vivencia, se convierte en aprendizaje significativo.
Las edades ideales para iniciar la manifestación de esta inteligencia son tempranas, entre 3 a 5 años es lo recomendable.
La danza es un maravilloso arte para potenciar la inteligencia kinestésica y garantiza que el bailarín desarrolle las siguientes características:
- Explora el entorno y los objetos por medio del tacto y movimiento.
- Desarrolla su coordinación y sentido el ritmo.
- Aprende mejor por medio de la experiencia directa y la participación.
- Demuestra destreza en tareas que requieren de empleo de motricidad fina o gruesa.
- Comprende y vive de acuerdo con hábitos físicos saludables.
En nuestra academia conocemos bien la importancia que tiene la danza para la vida en general de todas nuestras alumnas y debido a las actuales circunstancias nos hemos adecuado para ofrecer clases virtuales de ballet para niñas en edades entre 3 a 17 años.